Estos versos, lector mío,
que a tu deleite consagro,
y sólo tienen de buenos
conocer yo que son malos,
ni disputártelos quiero,
ni quiero recomendarlos,
porque eso fuera querer
hacer de ellos mucho caso.
No agradecido te busco:
pues no debes, bien mirado,
estimar lo que yo nunca
juzgué que fuera a tus manos.
En tu libertad te pongo,
si quisieres censurarlos;
pues de que, al cabo, te estás
en ella, estoy muy al cabo.
Fragmento de Al lector de Sor Juana Inés de l Cruz.
Se ha tratado el papel del editor como personaje principal en la selección, producción y publicación de un libro; y es en el primer proceso de selección en donde la creación abre paso. Dentro de los primeros pasos del editor se encuentra con la obligación de asumir el rol de promotor cultural y hombre de negocios a la par: vender algo de calidad cultural.
Al discriminar manuscritos el editor se enfrenta a todo un manual de lo que debe y no debe ser o tener un posible texto a publicar luego de ser registrado. ¿Qué se evalúa en un manuscrito? La temática, la extensión del libro y si puede considerarse dentro del proyecto editorial (de acuerdo a planes y situación económica).
Los anteriores puntos engloban las categorías a considerar; sin embargo para llevar a esta generalización se necesita una serie de lecturas y la opinión de especialistas o consultores, los cuales tienen la capacidad de aconsejar o darle auge a libros representativos.
Dentro de este primer proceso para la publicación de libros, el editor debe considerar: las posibles reacciones del público, las opiniones de editores especializados, la opinión de consultores, así como proyectar la visión de los departamentos de producción, finanzas y mercadotecnia.
El manuscrito puede llegar a la editorial por 4 razones fundamentales: por la recomendación de los distintos departamentos. Por los buscadores de libros, los cuales deben estar atentos a los lanzamientos; por premiso entre editoriales, o bien, premios a manuscritos no publicados. Y finalmente los agentes literarios, quienes trabajan para el editor.
En este último punto cabe destacar la elaboración de textos por encargo; aquellos en donde el editor puede aportar ideas primarias.
El último aspecto fundamental en el primer proceso es el financiamiento para el desarrollo editorial. Desde los egresos: el anticipo de pago a los autores, al personal de planeación y el sistema de préstamos. Mientras que la programación de necesidades abarca los ingresos y egresos que deberá proyectar la casa editorial.
Lo anterior debe considerarse en la relación que se establecerá entre el proceso editorial y la planeación de ventas: definición del público, libros por suscripción, entre otros.
Pero todo eso no sirve,
pues pensarás que me jacto
de que quizá fueran buenos
a haberlos hecho despacio;
y no quiero que tal creas,
sino sólo que es el darlos
a la luz, tan sólo por
obedecer un mandato.
Esto es, si gustas creerlo,
que sobre eso no me mato,
pues al cabo harás lo que
se te pusiere en los cascos.
Y adiós, que esto no es más de
darte la muestra del paño:
si no te agrada la pieza,
no desenvuelvas el fardo.
Fragmento final de Al lector de Sor Juana Inés de l Cruz.
lunes, 26 de abril de 2010
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